Hace un mes que os prometí contaros la historia de mi peludita, os acordais?
Pues lo prometido es deuda.
Como ya os había dicho...tengo una perrita, su historia no es nada bonita desgraciadamente hay gente que se divierte haciendole daño a los animalitos.
Mi pequeña se llama viki, es de raza yorkshire y desgraciadamente ella sugrió malos tratos.
Esta historia empieza un verano de 2008, no se si alguna vez tuve la oportunidad de deciros que me encanta viajar y conocer mundo, ese año fuimos a Benidorm y por una cosa u otra acabamos visitando una perrera, en ese momento empezé a creer en el amor a primera vista...allí estaba la perrita que yo quería, la perrita que sabía que su destino estaba en mis manos, no me lo pensé ni un segundo, yo me la tenia que llevar y cambiarle la vida.
Decir que nos nos pusieron nada fácil el llevárnosla ya que nos ponían la pega de que era agresiva, por culpa de que había recibido malos tratos...la verdad es que allí en la perrara si que era bastante mala.
Una vez ya arreglados los papeles no nos dejaban traerla hasta que no estuviera vaciada, preguntamos el porque...y lo que nos dijo fue que había mucha gente que se llevaban a una perrita, la explotaban a tener cachorros y después la devolvían, no pudimos hacer nada para evitarlo por mas que intentamos decir que eso no iba a pasar. De allí nos fuimos sin la perrita, durante todo el tiempo que estuvimos de vacaciones fuimos a verla en varias ocasiones para que nos fuera conociendo, cuando fue el momento de volver para casa, allí se quedo ella hasta que por fin el 28 de Agosto del 2008 sin yo tener ni la mas mínima idea...alguien pica en la puerta de casa, era mi madre y traía con ella a la pequeñaja!!
Cuando la ví, lo primero que dije fue...NO LA TOCO!
Pero vi que no era como en la perrera, vi que solo quería cariño y tener un hogar donde vivir.
La verdad...sus condiciones en la perrera eran penosas...
PE-NO-SAS
Tenía parásitos en el intestino, pulgas garrapatas estaba llena de todo tipo de excrementos, su pelo lleno de rastas. Cuando allí nos dijeron que iba a llegar en perfectas condiciones: desparasitada, limpia...
Antes de llegar mi madre a casa con ella, tuvo que llevarla al veterinario y a la peluquería porque del olor que desprendía no podía meterla ni en el coche...
Una vez ya acicalada parecía otra cosa... sin embargo se veía mas la dura vida que paso, le faltan dientes, tiene alguna que otra cicatriz, se le notaban todos y cada uno de los huesecitos, y no apoya del todo una patita de atrás debido a golpes que debió de recibir.
Gracias a dios ahora esta con nosotros y aunque nos costó lo nuestro ganarnos su confianza por el simple hecho de que le tenía miedo a absolutamente todo, por fin es una perrita feliz y tiene una familia que la quiere con locura.
Os dejo unas fotitas de mi pequeña, la pena es que perdí las fotos de cuando estaba en la perrera para que vierais el cambio, pero bueno no es difícil de imaginar!
Decir que nos nos pusieron nada fácil el llevárnosla ya que nos ponían la pega de que era agresiva, por culpa de que había recibido malos tratos...la verdad es que allí en la perrara si que era bastante mala.
Una vez ya arreglados los papeles no nos dejaban traerla hasta que no estuviera vaciada, preguntamos el porque...y lo que nos dijo fue que había mucha gente que se llevaban a una perrita, la explotaban a tener cachorros y después la devolvían, no pudimos hacer nada para evitarlo por mas que intentamos decir que eso no iba a pasar. De allí nos fuimos sin la perrita, durante todo el tiempo que estuvimos de vacaciones fuimos a verla en varias ocasiones para que nos fuera conociendo, cuando fue el momento de volver para casa, allí se quedo ella hasta que por fin el 28 de Agosto del 2008 sin yo tener ni la mas mínima idea...alguien pica en la puerta de casa, era mi madre y traía con ella a la pequeñaja!!
Cuando la ví, lo primero que dije fue...NO LA TOCO!
Pero vi que no era como en la perrera, vi que solo quería cariño y tener un hogar donde vivir.
La verdad...sus condiciones en la perrera eran penosas...
PE-NO-SAS
Tenía parásitos en el intestino, pulgas garrapatas estaba llena de todo tipo de excrementos, su pelo lleno de rastas. Cuando allí nos dijeron que iba a llegar en perfectas condiciones: desparasitada, limpia...
Antes de llegar mi madre a casa con ella, tuvo que llevarla al veterinario y a la peluquería porque del olor que desprendía no podía meterla ni en el coche...
Una vez ya acicalada parecía otra cosa... sin embargo se veía mas la dura vida que paso, le faltan dientes, tiene alguna que otra cicatriz, se le notaban todos y cada uno de los huesecitos, y no apoya del todo una patita de atrás debido a golpes que debió de recibir.
Gracias a dios ahora esta con nosotros y aunque nos costó lo nuestro ganarnos su confianza por el simple hecho de que le tenía miedo a absolutamente todo, por fin es una perrita feliz y tiene una familia que la quiere con locura.
Os dejo unas fotitas de mi pequeña, la pena es que perdí las fotos de cuando estaba en la perrera para que vierais el cambio, pero bueno no es difícil de imaginar!
Que cara de lista tiene ¿Verdad?
No os podéis hacer a la idea de lo lista que es, todo lo entiende!!
Este día fue la primera vez que vio la nieve, le encanto correr y saltar!!
Consecuencias....después tenía bolas de nieve enredadas en el pelo.
Estas son las siestas de todos los días jajaja!
Lo que le costó dormir tranquila los primeros meses.
NO COMPRES, ADOPTA.
Salvar la vida de un peludito es lo mejor que puedes hacer en esta vida.